jueves, 14 de junio de 2007

El típico cliché de invierno


La lluvia Inspira. El sonido constante del agua cayendo desde el cielo puede que calme por un instante los animos y nos de tiempo para reflexionar- aunque sea un segundo -sobre las cosas que nos importan. O las que menos nos importaban.
No conocía el invierno. No desde el punto de vista en el que hay que hacerlo. El frío me cargaba, las nubes, mayo, junio, julio y agosto; eran para mi los meses negros y lentos que estorbaban en el calendario.
Pero apredí a descubrir los colores de esta época. Los rojos y cafés que brotan en la temporada. El olor a un café caliente que es bienvenido a cualquier hora del día. Las caminatas bien acompañadas y abrigadas que se pueden comparter a las 4 de la tarde sin que te duela la cabeza como en el verano.

Veo a esa gente ocultandose del agua. Como si fuera algo dañino. Una gota asesina que destruirá su ropa de Almacenes París pagada a 6 cuotas y mil interés. O los que corren desesperados cuando la tormenta se avesina. O las madres retando a sus críos por cometer el pecado divino de mojarse y chapotear en el agua.
Deja que caiga la lluvia carajo!

Santiago, a pesar de el smog y las inundaciones, tiene hermosos paisajes en ésta epoca. Quizás la flojera que nos motiva a taparnos hasta el cuello en una fría tarde, nos impide descubrir una epoca que no es gusto de la mayoría.
Pero nunca me he considerado parte de la mayoría.


"Aunque sea este el último dolor que ella me causa y estos sean los últimos versos que yo escribo"


2 comentarios:

Franci@ dijo...

Muy de acuerdo Mr Kute...
no hay como caminar por las humedas y solitarias calles, abandonadas por los cobardes que arrancan del frío... me encanta el olor a tierra mojada después del aguacero... y el exquisito viento frío golpeándote la cara.
He aprendido a amar la lluvia...
Besos,
F

Franci@ dijo...

mmm... también es rico regalonear en camita los días de lluvia... jaja